Antón, inquieto y juguetón, descubre a una lagartija el día de su fi esta de cumpleaños y la convierte en su mascota pero la lagartija, ¡ay! tan pronto la ve como no la ve porque no para quieta02026; Cómo él que descubrirá fascinado la estrategia de desprenderse del rabo para huir de sus enemigos y a tener la paciencia de esperar a que crezca de nuevo.
Una bocanada de aire fresco para niños hiperactivos o con síndrome de falta de atención02026; y para los que conviven con ellos.