En París, conocida como la ciudad del amor, una joven adolescente descubrirá la importancia de las relaciones gracias a sus amigas, su prima, su hermana y, sobre todo, gracias a un chico muy especial. Rodeada de lujos y grandes marcas, la vida de Gabrielle parecía perfecta vista desde fuera, con una hermosa familia unida, una bella mansión retirada en las montañas, talento para el ballet y los estudios y mucha confianza en sí misma, altanería y orgullo. Pero su entrada a los diecisiete años será tumultuosa y estará llena de emociones, sobre todo cuando conozca a los compañeros de su nueva escuela, especialmente a Dimitri. Con él empezará una nueva etapa de su vida y descubrirá un París que nunca antes había visto. La torre Eiffel será testigo de sus alegrías y errores, escenario del florecimiento de su amor y la consolidación de las amistades que forjará. Gabrielle irá superando los distintos obstáculos de la vida junto a sus amigas y la autora nos meterá en el día a día y la piel de una joven de un mundo casi de fantasía en su entrada a la madurez. Su encaprichamiento se convertirá en una aventura cuando descubra el secreto que le oculta la persona en la que más confiaba. ¿Podrá su amor superar todas las barreras? Dimitri es un chico atractivo y libre. Con su pelo negro, sus gafas de Gucci y su Vespa, es el sueño de Gabrielle. Será amor a primera vista para ella, pero no para él. Dimitri no le prestará atención en un primer momento, así que tendrá que ser la perseverancia y confianza de ella las que le abran los ojos. Finalmente, Dimitri descubrirá en Gabrielle a una joven extraordinaria, talentosa, hermosa y simpática. Poco a poco irán acercándose, pero el pasado y el presente les jugarán malas pasadas, especialmente cuando otra gente se interponga en su relación. Solo su amor, una buena dosis de confianza y el apoyo de sus amigos podrán ayudarles a salir adelante.
