A lo largo de su trayectoria profesional, Eduardo Chillida no dejó de cuestionarse todo lo que fuera relevante a su compromiso con el arte. Sin ánimo de crear un pensamiento paralelo a su obra, utilizó la escritura para plasmar sus reflexiones, utilizando para ello cuadernos, fragmentos de papel o márgenes de dibujos y apuntes, hojas sueltas... Lo hizo de una manera intermitente, sin un orden preestablecido, a mano, con su característica letra mayúscula. Eran reflexiones íntimas, de uso propio, destinadas a fijar los temas y preguntas a los que repetidamente volvía.
Este volumen reúne todos sus escritos, en su mayoría inéditos hasta la fecha, recopilados y editados en colaboración con la familia del artista. Se distribuyen en cinco apartados: Miradas, donde Chillida aborda cuestiones como la percepción, el conocimiento, el mar, los derechos humanos o la creencia religiosa, en los que el nexo común es el tono poético en que están escritos; Códigos del artista, capítulo que recoge sus reflexiones en torno al trabajo de la creación; Yo soy un fuera de la ley, un largo texto en prosa que probablemente fuese un borrador de una conferencia; Preguntas, escrito como discurso de entrada en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, una síntesis de las cuestiones esenciales que le preocuparon como artista a lo largo de su vida; y Homenajes, en donde el escultor rinde tributo a personas y artistas como Gabriel Aresti, Pío Baroja, Bach, Joan Brossa, Joan Miró, Mark Rothko o María Zambrano, entre muchos otros.
Eduardo Chillida (San Sebastián, 1924-2002) es uno de los grandes artistas del siglo XX. Premio Príncipe de Asturias en 1987 y académico de Bellas Artes en Madrid, Boston y Nueva York, legó a la posteridad una importantísima obra escultórica, nacida de una pregunta constante al tiempo y al espacio. Sus trabajos alcanzan la plenitud junto a los lugares en que el autor buscaba respuestas: el mar, el horizonte, la luz atlántica...
