¿Quiénes son? Los objetores. ¿A qué se dedican? A boicotear bodas por encargo. ¿Qué dilema tienen? Que puede que se hayan enamorado el uno del otro.
Cuando Sophie Steinbeck descubre, justo dos días antes de su boda, que su prometido le ha sido infiel, lo único que quiere es cancelar todo. Pero como su futuro suegro es el jefe sin escrúpulos de su padre, no quiere cargar con las consecuencias de dar ese paso. La solución aparece en la forma de un objetor profesional, cuyo trabajo consiste en presentarse en las ceremonias y pronunciar las palabras que ninguna pareja (en circunstancias normales) quiere escuchar: «¡Me opongo!».
Esa noche, mientras celebran en la suite nupcial la cancelación de la boda, Sophie se interesa por el peculiar trabajo del objetor, al que le encuentra toda la lógica del mundo: ese hombre ayuda a las personas a evitar que arruinen sus vidas y sufran innecesariamente. Para ella, Max Parks es un héroe moderno, y no tarda en decidir que quiere formar parte de esa misión