NOS HICISTE PARA TI, SEÑOR

Esta obra nos ayuda a entender que el pensamiento de Joseph Ratzinger tiende siempre a sacar a la luz lo razonable de un mensaje, el cristiano que, sin ser una construcción humana, armoniza plenamente con las exigencias de la razón. La reflexión sobre el hombre es fundamental tanto en la filosofía como en la teología, porque una de las características del ser humano es que estamos ante alguien que es capaz de interrogarse sobre sí mismo y que necesita encontrar respuestas a las preguntas sobre el sentido de su vida y de su muerte que le acompañarán siempre. El mensaje cristiano no puede prescindir de estas preguntas porque Cristo se ha hecho hombre y ha entregado su vida para salvar a toda la humanidad. La antropología teológica, además, es también uno de los elementos que nos clarifica la íntima conexión de las verdades cristianas entre sí: el problema del mal y del pecado, la doctrina de la redención en Cristo, la misma comprensión del hombre, que se clarifica a partir de Cristo, "el hombre perfecto", y la doctrina sobre el destino último del ser humano son coherentes si partimos de una antropología adecuada. D. Jorge ha puesto de manifiesto en su estudio esta trama de conexiones que aparecen en el pensamiento de Joseph Ratzinger-Benedicto XVI y que lo hacen, si cabe, más apasionante (Del prólogo de Mons. Enrique Benavent Vidal, Arzobispo de Valencia).