“El riesgo de la vanidad. Redes sociales deportivas y su efecto sobre la salud mental” es el título de la nueva publicación de la Institució Alfons el Magnànim, la editorial de la Diputación de Valencia, escrito por el periodista e historiador Carles Senso, que trabajó con una muestra de campo de centenares de deportistas de prácticas como el triatlón, atletismo, senderismo, ciclismo o natación para configurar un estudio específico sobre el efecto psicológico de las plataformas tecnológicas deportivas, un campo inédito hasta el momento. El libro cuenta con el prólogo del prestigioso periodista Alfredo Relaño, director del periódico deportivo As entre 1996 y 2019 y actual colaborador de la Cadena Ser y El País. Arguye Relaño: “Senso aporta un estudio innovador y abre con él una nueva ventana a la investigación. Nadie hasta el momento había contrastado que los deportistas modifican su comportamiento práctico por el efecto de la mirada de los demás a través de las redes sociales, y eso debería tratarse debidamente (educarnos con conocimiento de causa) para evitar daños mayores. Estudios como el de este libro nos hacen más conscientes, nos obligan a reflexionar y nos invitan a adelantarnos un poco en el tiempo y a dejar de ir a contracorriente, a menudo intentando arreglar lo que ya está roto”.
Según explica el autor: “Las plataformas digitales deportivas, en su afán por conquistar la atención de los usuarios, potencian la interacción social y provocan un aumento de la presión, dependencia emocional, frustración e insatisfacción, incluso llevando a los deportistas a asumir retos deportivos inadecuados para conseguir o consolidar su estatus entre su “comunidad” digital. Disfrutar con la práctica, para muchos y muchas, está sujeto ahora a la opinión del resto y la constante comparativa”.
Aplicaciones como Strava gamifican (convierten en juego) la práctica deportiva, “obligando” a deportistas amateurs a una productividad y perfeccionamiento constante, incluso en los entrenamientos. Senso constata que un 18,4 % llevan su cuerpo (su capacidad física) al límite para superar algún registro virtual. La admiración y respeto de la comunidad digital es clave en dicho planteamiento. Según el autor: “La sobreexposición del nuevo paradigma comunicacional ha diluido, hasta prácticamente hacer desaparecer, las diferencias entre los espacios públicos y privados, por lo que hoy la participación en entrenamientos y competiciones son evaluados o, como mínimo observados, por múltiples personas que, siguiendo la tendencia de las otras redes sociales más genéricas, opinan. Opinan sin filtros”.