"Para educar en valores democráticos e inclusivos, ¿sirven todas las prácticas pedagógicas? Una organización escolar basada en una presunta homogeneidad, ¿excluye, discrimina y resta posibilidades al alumnado?
Estructurar los grupos de forma internivelar, mezclando edades, no es una práctica nueva. La reflexión sobre ella, desde una metodología inspirada en Celestín Freinet y enriquecida por una larga trayectoria en los entornos rurales, nos suma a las tendencias actuales más innovadoras.
Aprender con los demás, y de los demás, se convierte en una oportunidad para el desarrollo de innumerables competencias intelectuales y sociales, respetando los diferentes ritmos de aprendizaje. Espacios abiertos, rincones de trabajo, aulas multiuso, tiempos flexibles, proyectos elegidos, agrupamientos diversos para diferentes aprendizajes, textos libres, investigación del medio, cálculo vivo y asambleas de clase, toda una práctica que proponemos en esta publicación, con el fin de repensar otra forma de escuela, más igualitaria, natural, libre y comprometida."