C. TANGANA

Las muy diversas metamorfosis en las que se ha embarcado el artista diseccionado en estas páginas, por muchos conocido como C. Tangana, mas también por otros como Crema, en su primeros tientos profesionales, El Madrileño (por antonomasia, pese a su sentida raigambre celtíbera), y Pucho para todo el mundo –cuando no Puchito–, sin que por ello haya dejado de atender a su verdadero nombre, Antón Álvarez Alfaro, es un fenómeno digno de encomio y de estudio por su ya venerada y laureada carrera musical, pero también por sus singulares emprendimientos artísticos y empresariales que trascienden sus no menos variopintas aventuras en el mundo de la música y que desde la moda y el cine, abarcan la prolífica producción artística de este portento multidisciplinar.



De todas las diversas facetas de este singular creador que emanan de las reencarnaciones –en vida– de Álvarez Alfaro y de sus incursiones en todo lo abarcado hasta la fecha dan cuenta y noticia estos breves ensayos que conforman una poliédrica aproximación a la vida y obra del biografiado en los estudios de grabación, sobre las tablas, durante sus giras con otros compañeros de armas, y también de sus notables colaboraciones con otros creadores. Buena falta hacía este mosaico coral para zambullirnos en el proceso creador de este metamórfico, camaleónico e imprevisible hombre de su tiempo.