Soleil disfruta de una vida convencional. Esposa del juez Eric Bisset y madre del pequeño Daniel, trabaja como ingeniera informática desde su casa en Carcasona. Convencional, pero no feliz. La vida de Soleil está controlada por su marido y su suegra. El refugio de Soleil es su ordenador, desde donde se siente capaz de controlar el mundo. Hasta que todo se tuerce. Una tarde de lluvia, Soleil y su hijo se ven atrapados por la riada dentro de su coche. Consigue poner al pequeño a salvo, pero las furiosas aguas del río la arrastran antes de poder salir.
Esa tarde, Soleil Bisset muere. Ese día, nace Moon Aubry. Seis años después, Moon, detective privada en París, acepta el encargo de acabar con una persona ligada a su pasado. Comienza entonces una desenfrenada carrera contrarreloj por salvar a su supuesta
víctima que pondrá en peligro, por segunda vez, la nueva vida que se había construido.
«Muy pocos escritores en nuestro país manejan el suspense con mayúsculas como lo hace Susana». CÉSAR PÉREZ GELLIDA